Vindicacion de la bicicleta playera en una cita

Segun la tesis, las bicicletas playeras, que se frenan contra manubrio, han sido creadas de los surfers que iban a las playas montandolas y no ha transpirado llevaban la tabla en Algunos de los brazos vales de descuento internationalcupid, lo que dificultaba frenar con las dos manos apretando los sistema de frenado delanteros. No se si sera cierta No obstante me encanta. Me gustan las bicicletas playeras por motivo de que son simples, aereas, asi­ como porque me da la impresion sobre que cuando me subo a ellas estoy en otro grado de el espacio tiempo. La playera es humilde. Seri­a dificil que sea objetivo de anhelo de alguien. Asfalto levantarme excesivamente temprano desde que me acostumbre a mis hijos al colegio anteriormente de que empezara el fin del ambiente. Desplazandolo hacia el pelo esa rutina me gusto. En otras palabras que uso de vivir el conmemoracion entretanto existe brillo real y no artificial. Me voy apagando con la noche.

Entretanto parpadea la primera brillo de el amanecer, veo que en el rectangulo que permite ver a la pileta de natacion de la acera sobre enfrente, bien Existen personas nadando, aun con demasiado frio y no ha transpirado el tejado abierto. El agua azul se mueve repiqueteando con el resplandor de las luces de el tejado desplazandolo hacia el pelo 2 por 3 veo pasar brazos asi­ como cabezas que nadan igual que en un poema magnifico de Hector Viel Temperley.

Me duele el cuerpo humano porque ayer sali an andar en bicicleta a lo largo de varias horas con con mi amigo Gaby. Tomamos un ruta que va por el rio y no ha transpirado terminamos en la playa increible, pedregosa, donde un varon –un Thoreau moderno- reside en la casita que se construyo casi sobre el rio, con materiales muy precarios. Al lado sobre la morada existe un motocicleta con la que, alguno supone, va sobre ocasii?n en cuando a la localidad. Mi amigo Gaby me trajo hasta aca porque, me muestra, Tenemos un arbol que da la impresion destinado con el fin de que individuo se siente asi­ como medite. Existen esos lugares en la poblacion, que parecen portales an una diferente vida, sin embargo uno puede permanecer dormido con la televisor prendida primero de proceder a buscarlos. Le cuento a Gaby que la vez Skay me dijo que el habia visto un bosque en la poblacion donde podia ir a meditar carente que lo molestara ninguna persona, puesto que era un sitio frondoso y alejado.

Cuando volvemos de el trayecto, pienso que asi igual que yo estoy contento mi bicicleta tambien lo esta. Asi­ como pienso en la bicicleta de cross, carisima, que un amigo que se va a Espana por varios meses va a dejar guardada en un hangar con el fin de que ninguna persona la use hasta que el vuelva. Que pena me da eso que la bicicleta tenga que permanecer sin reflejar su intensidad a duo con otro como ciclista, que no le pudiese dar y cobrar alegria mutua. Seri­a igual que con el fin de que Pixar realice la cinta con la pobre bicicleta que se queda encerrada. Nos negamos a descuidar las cosas, a cederlas para que otros las usen, no practicamos el arte de desaprovechar cualquier, que es lo que para resumir nos va an ocurrir. Me rio porque me consenso de el estribillo sobre una cancion del grupo experiencia (que en su segundo fue prohibida por la dictadura y que pienso le hubiera gustado a Walter Benjamin) “y mientras las ninos miran/ las juguetes se preguntan/ con tantos ninos afuera/ que hacemos en la vidriera”.

Hay exacto animismo en como miramos a las juguetes o a los objetos que utilizamos. Pienso en ese bello relato sobre Cesar Aira que se titula Artforum, en donde el protagonista esta enamorado sobre una revista sobre procedimiento desplazandolo hacia el pelo se pregunta En Caso De Que ese apego sera correspondido por la dichosa revista. Justamente tengo un nuevo libro sobre Aira referente a la mesa. Resulta una compilacion de textos con los que el escritor dio la pelea por dar con la cabecera sobre playa a donde instalar su labor. Se llama La oleaje que lee (titulo malisimo) asi­ como abarca material asi­ como resenas que van de 1981 inclusive el 2010. Leer este libro seri­a igual que ver Boyh d, esa cinta de Richard Linklater que se filmo a las dilatado de doce anos de vida asi­ como a donde veiamos engrandecerse al chaval principal desplazandolo hacia el pelo a todos las protagonistas –sobre al completo a Patricia Arquette en una comportamiento notable- . Aca esta el Aira inaugural que despedaza a toda la grupo sobre escritores (es tremendo cualquier lo que leyo a pesar sobre que no le gustaba lo que leia) e instala –de la manera solipsista al mango- a los escritores que valen la pena Osvaldo Lamborghini, Arturo Carrera, Puig y no ha transpirado uno mas. Aira realza la literatura igual que puro sistema haciendo hincapie en el doctrina de Raymond Roussel. Asi­ como en la teoria Deleuziana de el periodista inferior.

El Aira actual nunca da reportajes en nuestro pais realiza bastante. Solo los concede en el exterior a donde su trabajo empezo a proliferar en demasiadas traducciones. El nino Aira que podemos leer en dichos textos, en marchas, contesta lo que le venga habla sobre el estado sobre la novela argentina, responde a la averiguacion referente a quien seri­a el mas grande de las escritores argentinos, asi­ como aniquila a los escritores de el b m Fuentes, Vargas Llosa, Cortazar, Garcia Marquez. Es bastante bueno el adiestramiento que escribe para el semanario El Porteno en Juan Jose Saer, con el que goza de una trato sobre lectura paradojica lo considera un enorme articulista que solo puede aspirar a eso, an acontecer un gran periodista. Con Respiracion artificial de Piglia no tiene dudas el ejemplar le da la impresion malisimo.

Existen aquellos lugares en la urbe, que parecen portales an otra vida, sin embargo alguno suele permanecer dormido con la televisor prendida primeramente de partir a buscarlos.

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